Evo Morales culpa a la derecha, peruanos y EEUU por sobres bomba
Cortesía : AFP
El presidente de Bolivia, Evo Morales, culpó este jueves a la oposición de derecha de la autoría de dos sobres bomba, uno de ellos dirigido a un poderoso dirigente oficialista, en el marco de un plan de desestabilización que incluiría a peruanos entrenados por Estados Unidos.
La Paz fue escenario el miércoles de la explosión de dos sobres bomba, uno dirigido al líder campesino Fidel Surco y otro a un empresario de la construcción, que dejaron siete heridos, mientras la Policía aún no halla nexos entre los dos hechos.
"Es un tema político, es agresión al proceso (su gobierno) y hacia sus autoridades, lo lamentable es que hay gente experta, entrenada, fuera de Bolivia y dentro de Bolivia", afirmó Morales en conferencia de prensa.
Según el mandatario, lo sucedido forma parte de un plan de la derecha opositora que busca desestabilizarlo, y ésta incluso habría contratado a delincuentes bolivianos y peruanos.
Morales mencionó "que algunos malos peruanos (son) entrenados por gente del exterior, no solamente de Estados Unidos", sin entrar en detalles "por motivos de investigación".
El gobernante boliviano ha acusado de manera reiterada a Washington de complotar contra su gestión, de corte indígena y estatista. Bajo esta acusación, expulsó en 2008 al embajador de Estados Unidos y a la agencia antidrogas norteamericana (DEA), aunque nunca mostró pruebas.
También está enfrentado con la élite civil y política de cinco de los nueve departamentos del país, mientras espera ser reelegido en los comicios de diciembre próximo, por cinco años más.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, culpó este jueves a la oposición de derecha de la autoría de dos sobres bomba, uno de ellos dirigido a un poderoso dirigente oficialista, en el marco de un plan de desestabilización que incluiría a peruanos entrenados por Estados Unidos.
La Paz fue escenario el miércoles de la explosión de dos sobres bomba, uno dirigido al líder campesino Fidel Surco y otro a un empresario de la construcción, que dejaron siete heridos, mientras la Policía aún no halla nexos entre los dos hechos.
"Es un tema político, es agresión al proceso (su gobierno) y hacia sus autoridades, lo lamentable es que hay gente experta, entrenada, fuera de Bolivia y dentro de Bolivia", afirmó Morales en conferencia de prensa.
Según el mandatario, lo sucedido forma parte de un plan de la derecha opositora que busca desestabilizarlo, y ésta incluso habría contratado a delincuentes bolivianos y peruanos.
Morales mencionó "que algunos malos peruanos (son) entrenados por gente del exterior, no solamente de Estados Unidos", sin entrar en detalles "por motivos de investigación".
El gobernante boliviano ha acusado de manera reiterada a Washington de complotar contra su gestión, de corte indígena y estatista. Bajo esta acusación, expulsó en 2008 al embajador de Estados Unidos y a la agencia antidrogas norteamericana (DEA), aunque nunca mostró pruebas.
También está enfrentado con la élite civil y política de cinco de los nueve departamentos del país, mientras espera ser reelegido en los comicios de diciembre próximo, por cinco años más.
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