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sábado, 30 de agosto de 2008

PUNTADAS CON NUDO No.3 : CUTH RESPALDA INCORPORACIÓN DE HONDURAS AL ALBA

FEDERACIÓN SINDICAL MUNDIAL (FSM) - REGIÓN AMÉRICA - CUBA
La CUTH respaldó la incorporación de Honduras a la ALBA
Por Ramón Cardona, Secretario de la FSM. Región América

Informaciones de la FSM editadas en Rebanadas:
Rebanadas de Realidad
Con satisfacción hemos conocido que todas las organizaciones afiliadas a la Confederación Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH), respaldaron el pasado 25 de agosto la incorporación de Honduras a la Alternativa Bolivariana para las América en acto en el que participaron los compañeros Hugo Chávez, Presidente de Venezuela; Evo Morales, Presidente de Bolivia; Daniel Ortega, Presidente de Nicaragua y Carlos Lage, Vice Presidente de Cuba.
La Federación Sindical Mundial en las América reafirma que considera al ALBA, como es conocido, un verdadero modelo de integración latinoamericana porque hermana a nuestros pueblos, porque no implica la adopción de un modelo competitivo sino de complementariedad, porque promueve la solidaridad entre los pueblos rechazando los estrechos egoísmos nacionales, porque comprende las diferencias atendiendo a los más vulnerables. Comoquiera que el ALBA sitúa al hombre al centro de sus empeños constituye un propósito que tiende a hacer realidad las esperanzas acumuladas durante siglos en los que han imperado la avaricia y la ambición causantes de inhumanas y crueles consecuencias.
El acto masivo, donde mas de cien mil personas presenciaron la firma de la voluntad de incorporación de Honduras al ALBA, fue celebrado en la "Plaza de la Libertad", frente a la casa presidencial, contando con la presencia de Manuel Zelaya R. presidente de Honduras, quien al impulsar la decisión de insertar a Honduras en el ALBA, ha tenido que enfrentar a los grupos de poder en este país y a las amenazas del imperialismo estadounidense.
Nos anima constatar que esta determinación del gobierno hondureño, puede ser el preámbulo para que las organizaciones sindicales tengan la oportunidad de incidir en transformaciones que beneficien a los trabajadores y a las grandes mayorías
.
Para alcanzar tales empeños, la FSM estará presta a brindar su aporte.
El presente material se edita en Rebanadas por gentileza de María de los Ángeles Valdés, integrante del Departamento de Prensa de la FSM
Rebanadas de Realidad - Buenos Aires, Argentina
Redacción:
redaccion@rebanadasderealidad.com.ar

jueves, 28 de agosto de 2008

PASOS RAPIDOS No. 3 : A PROPÓSITO DEL COMUNISMO, HACIENDO HISTORIA

Historia del comunismo
La historia del Comunismo está sumamente enraizada al pensamiento
ideológico que el filósofo Karl Marx delineó en el siglo XIX. Éste vio al comunismo como el estado original, el estado de cazador-recolector del cual el género humano surgió. Para Marx, sólo después de que la humanidad era capaz de producir en exceso, la propiedad privada se desarrolla de forma masiva y permanente. Sin embargo en Occidente, el comunismo era una idea de una sociedad basada en la propiedad común, idea que se remonta incluso desde la Antigüedad clásica. Su forma moderna como un movimiento político de masas surgió en Europa con el movimiento de los trabajadores durante la Revolución Industrial en el siglo XIX.
En el siglo XIX, el ascenso del comunismo como una idea política fue expresada por Karl Marx, que desarrolló el
Marxismo, y Friedrich Engels, que desarrolló la concepción moderna de comunismo como el resultado de una revolucionaria lucha de clases entre el proletariado y la burguesía.
La primera vez en donde un
Partido Comunista logró el poder fue en la Revolución rusa de 1917. Después de la revolución, el marxismo-leninismo surgió como la bandera principal del comunismo en la política mundial. Posteriormente surgió una nueva forma de marxismo-leninismo en China, conocida como Maoísmo que acentúa el papel de la clase campesina como los agentes de revolución.
Tabla de contenidos
1. De la Antigüedad al siglo XVIII: el pre-comunismo
1.1 El comunismo de Platón
1.2 Comunismo cristiano
1.3 Otros "comunismos" anteriores a Marx
2 Marx, Engels y el Manifiesto Comunista
3 La Revolución de Octubre
4 Komintern
4.1 Comunismo europeo durante la época del Komintern
4.2 Comunismo latinoamericano durante la época del Komintern
4.3 Comunismo africano durante la época del Komintern
4.4 Comunismo oceánico durante la época del Komintern
5 La era de la posguerra
5.1 Comunismo en Europa Oriental durante la era de posguerra
6 El Comunismo hoy
7 Anexos
7.1 Referencias
7.2 Véase también
7.3 Bibliografía
De la Antigüedad al siglo XVIII: el pre-comunismo
El comunismo de Platón
Una de las primeras descripciones del comunismo se encuentra en un diálogo de
La República de Platón.
Lo que se llamó el comunismo platónico supone si no la supresión por lo menos la limitación drástica de la familia con la educación colectiva de los niños, así como la sumisión de toda
propiedad privada a la propiedad de la ciudad. El error de Platón, según Aristóteles, es querer unificar al exceso la ciudad, suprimiendo todo lo que separa a los individuos para acabar en una unión de fusión, como el que desean los amantes en el discurso de Aristófanes. Esto sería desconocer que la amistad se funda sobre una irreductible alteridad. Platón piensa teóricamente el comunismo esencialmente para la clase dirigente, esto sería con el fin de terminar con la corrupción que era acostumbrada en todo gobierno.
Comunismo cristiano
Los primeros cristianos practican la postura de comunidad de bienes, algo que ni recomienda ni condena el Nuevo Testamento. Tertuliano la recomienda pero San Agustín la condena por ser discordante con el dogma (el pecado original la hizo imposible) y Santo Tomás de Aquino por ser discordante con la razón (el individuo propietario es más responsable y administra mejor). La postura de comunidad de bienes es declarada de ésta forma herética por la Iglesia católica desde el siglo V.
Todos los creyentes son unidos y ponen en común todo lo que tienen. Venden sus propiedades y sus objetos valiosos, compartiendo todos ellos su dinero, y cada uno recibe lo que es necesario para él. Cada día, de un solo corazón, se reúnen escrupulosamente en el templo. Comparten el pan en sus casas, comen su alimento con alegría y con un corazón simple.[1]
"Y cada uno recibe lo que es necesario para él" se destaca pues Marx propone en efecto que una sociedad comunista sea una sociedad cuyo principio fundamental pasará "de cada uno según sus capacidades" a "cada uno según sus necesidades".
Nadie dice: "¡esto, me pertenece!", pero ponen todo en común. (...) entre ellos, a nadie le falta nada. En efecto, todos los que tienen campos o casas les venden, aportan el dinero de lo que vendieron y se lo dan a los
apóstoles. Luego, distribuimos el dinero, y cada uno recibe lo que es necesario para él. Hay así un cierto José, un lévita nacido en Chipre. Los apóstoles le llaman Barnabas, lo que quiere decir "el hombre que anima". Tiene un campo, lo vende, aporta el dinero y se lo da a los apóstoles.[2]
Más tarde, los cristianos católicos se asociarán con el marxismo, por ejemplo a través de la teología de la liberación pero esta asociación será rechazada por la Iglesia católica.
Otros "comunismos" anteriores a Marx
En el siglo XVI, el escritor inglés Santo Tomás Moro retrató una sociedad basada en la propiedad común en su tratado Utopía, cuyos líderes la administran con el uso de la razón.
Críticos de la idea de propiedad privada fueron algunos filósofos ilustrados del siglo XVIII, tales como Jean Jacques Rousseau. Convertido al calvinismo, Rousseau estaba bajo la influencia del movimiento jansenista dentro de la Iglesia Católica. El movimiento jansenista fue originado por los obispos católicos más ortodoxos, que trataron de reformar la Iglesia en el siglo XVII para detener la secularización y el protestantismo. Uno de los objetivos jansenistas principales era la democratización para detener la creciente corrupción aristocrática en lo alto de la jerarquía de la Iglesia.[3] "Socialistas utópicos" como Robert Owen también a veces fueron considerados como comunistas.
Maximilien Robespierre y su reinado de terror, apuntado a la exterminación de la nobleza y conservadores, fue tremendamente admirado entre los comunistas. Robespierre fue en su momento un gran admirador de Rousseau.
Las Cocteleras del siglo XVIII practicaron el comunalismo como una especie de comunismo religioso.
Algunos creen que utopías tempranas parecidas a la comunista también existieron fuera de Europa, como en la sociedad Amerindia, y otras sociedades pre-colonizadas del Hemisferio Occidental. Habitualmente cada miembro de una tribu tenía su propia contribución a la sociedad, y la tierra y los recursos naturales a menudo eran compartidos plácidamente entre la tribu. Algunas de éstas tribus en Norteamérica y Sudamérica todavía perduran con éste sistema hacia el siglo XXI.
Karl Marx vio el comunismo como el estado original de humanidad de la cual ésta surgió, por la sociedad clásica, y luego el feudalismo, hasta el estado corriente del capitalismo. Él propuso que el siguiente paso de la evolución social sería inevitablemente una vuelta al comunismo. Cuando la Revolución Industrial avanzó, los socialistas críticos culparon el capitalismo de crear una clase de trabajadores urbanos pobres de fábrica que trabajan en inhumanas condiciones para contribuir exclusivamente a aumentar la brecha existente, haciendo a los ricos más ricos y a los pobres aún más pobres.
Karl Marx, el padre del comunismo moderno
Marx, Engels y el Manifiesto Comunista
Aunque Marx tratara muchísimos temas, su amplia fama deriva de su análisis de historia en términos de lucha de clases, resumida en la famosa introducción al Manifiesto Comunista:
"La historia de toda la sociedad hasta ahora existente es la historia de
lucha de clases"
El Manifiesto Comunista, también conocido como el Manifiesto del Partido Comunista, publicado el
21 de febrero de 1848 es uno de los tratados políticos más influyentes en la historia del mundo. Comisionado por la Liga Comunista y escrito por Karl Marx y Friedrich Engels, éste presentó los objetivos de la Liga y el programa. El Manifiesto aconsejó un curso de acción para una revolución proletaria dispuesta a derrocar el capitalismo y, eventualmente, construir una sociedad sin clases. La introducción del texto comenzaba con un llamado a las armas:
Un espectro recorre
Europa - el espectro del comunismo. Todos los viejos poderes de Europa han establecido una alianza santa para exorcizar este espectro: el Papa y el Zar, Metternich y Guizot, Radicales franceses y espías de policía alemanes. ¿Dónde está el partido en la oposición que no ha sido censurado como comunista por sus opositores en el poder? ¿Dónde está la oposición que no tiene el reproche de estar marcada de comunista, contra los partidos de oposición más avanzados, así como contra sus adversarios reaccionarios?
El programa descrito en el Manifiesto es el llamado
socialismo o comunismo. La política incluía la abolición de la hacienda y el derecho a la herencia, el impuesto sobre ingresos progresivos, y la nacionalización de los medios de producción y el transporte. Esta política, que sería puesta en práctica por un gobierno revolucionario (la dictadura del proletariado), sería (como creían los autores) un precursor a la sociedad apátrida y sin clases. El término "comunismo" también es usado para referirse a las creencias y las prácticas del Partido Comunista, incluyendo él de la Unión Soviética, que se diferenció considerablemente del concepto de Engels y Marx.
Este al concepto de la transición del socialismo al comunismo que muchos críticos del Manifiesto, en particular durante y después de la era soviética, han apuntado.
Anarquistas, liberales y conservadores se preguntaron cómo una organización como el estado revolucionario podría alguna vez autodesintegrarse. Tanto los acuerdos tradicionales de la atracción del poder político como las teorías más recientes del comportamiento de la organización sugieren en cambio que un grupo asentado en el poder político tenderá a conservar su privilegio antes que que permitirse autodesintegrarse, incluso si se dan aquel privilegio en nombre de la revolución y del establecimiento de la igualdad:
Cuando, en el curso del desarrollo, las distinciones sociales han desaparecido, y toda la producción ha sido concentrada en las manos de una asociación enorme de la nación entera, el poder público perderá su carácter político. El poder político, correctamente supuesto, es simplemente el poder organizado de una clase para oprimir a otra. Si obligan al proletariado durante su competición con la burguesía, por la fuerza de las circunstancias, a organizarse como una clase; si, mediante una revolución, ella se hace la clase dirigente, y, como tal, barre por la fuerza las viejas condiciones de producción, entonces esto, con estas condiciones, habrá barrido las condiciones para la existencia de antagonismos de clase y de clases generalmente, y así habrá suprimido su propia supremacía como una clase.
Las famosas últimas líneas del Manifiesto Comunista son a su vez el llamado a generar las condiciones para crear una nueva sociedad sobre la base de quienes no tienen nada que perder: Los trabajadores del mundo.
Los Comunistas no se dignan a ocultar sus opiniones y objetivos. Ellos abiertamente declaran que sus fines pueden ser logrados sólo por el derrocamiento total de todas las condiciones sociales existentes. Dejen a las clases dirigentes temblar en una revolución comunista. Los proletarios no tienen nada para perder, salvo sus cadenas. Ellos tienen un mundo para ganar.
¡Trabajadores del mundo, uníos!

Vladimir Lenin, líder de la revolución bolchevique de octubre
La Revolución de Octubre

Artículo principal: Revolución de Octubre (1917)
La Revolución de octubre de 1917 ocurrió en Rusia. Conducido por Vladimir Lenin, líder del Partido Bolchevique, fue la primera gran iniciativa que intentó poner las ideas marxistas sobre un estado de los trabajadores en la práctica. Desde el principio, el nuevo gobierno tuvo que enfrentarse a fuerzas contrarrevolucionarias, principalmente de Revolucionarios Sociales y Mencheviques. Lenin y su partido comenzaron a centralizar el control de Rusia, pero Lenin siempre le aseguraba a la gente que aquello era necesario para la transición de una economía capitalista al comunismo. Lenin previó que después de la Revolución de octubre, otros países en Europa tendrían revoluciones similares, pero las revoluciones en Alemania, Hungría y Finlandia fueron aplastadas. El gobierno de Lenin, durante los últimos años de su vida, ocurrió en medio de la guerra civil. La práctica política de los comunistas durante éste período se ha hecho conocida como el Comunismo de guerra.[5] Antes de su muerte en 1924, Lenin escribió un último testamento, con consejos para su sucesor. Lenin quiso un mando cooperativo, pero Stalin, a quién Lenin describió como "demasiado rudo", gradualmente fue asumiendo el control hasta centralizar el poder político alrededor de su propia persona.
Komintern

Artículo principal: Internacional Comunista
En marzo de 1919 la Internacional Comunista (abreviada como Komintern, según su nombre en ruso, comúnmente conocida como la "Tercera Internacional") fue fundada. La fuerza principal de la nueva internacional eran los Bolcheviques rusos, a diferencia de las primeras internacionales en donde sus miembros eran más o menos heterogéneos. En gran parte esto ocurrió debido a la disidencia de izquierdistas de los principales partidos europeos Social-Demócratas. El Komintern intentó entonces organizarse como un partido mundial promotor de la revolución socialista. Los comités nacionales fueron instruidos para reconstruirse siguiendo los principios Leninistas. Para mantener a sus socios, el comité impuso 21 condiciones, entre ellas, cada comité nacional tuvo que tomar el nombre el Partido Comunista.
La oficina central de Komintern estaba instalada en
Moscú. La Internacional llevó a cabo un plan activo para construir nuevos comités en el mundo entero. Al principio la internacional estaba principalmente establecida en Europa, pero gradualmente secciones no europeas se fueron desarrollando. Después del partido ruso, el principal partido era el Partido Comunista de Alemania.
Durante el período del Komintern, en el cual el movimiento comunista moderno tomó forma, hubo intensos conflictos sobre el mando y la dirección del movimiento. Después de la muerte de Lenin,
Stalin comenzó a purgar a sus opositores. Más o menos, había dos agrupaciones disidentes principales: La Oposición de izquierdas, conducida por León Trotsky y la Oposición de derechas, conducida por Bukharin. Los desacuerdos dentro del partido soviético eran provocadas por escisiones en varias secciones del Komintern. A menudo las escisiones eran provocadas por expulsiones de opositores potenciales o reales al mando de Stalin.
Durante la última parte de los
años 1920 el Komintern adoptó una línea en donde denominó a los Social Demócratas como Fascistas Sociales. La tarea de las secciones del Komintern era de combatir la influencia de los Social Demócratas entre la clase obrera. La cooperación con la Socialdemocracia categóricamente fue excluida.
Sin embargo, después del ascenso del
Fascismo en Europa, esta política fue invertida. El 7º congreso del Komintern adoptó la línea de Frente Popular (que en algunos países como Francia, España y Chile[6] logró el poder en forma exitosa). Impulsaron a los comunistas a construir alianzas democráticas, incluyendo a los Socialdemócratas y otros partidos burgueses, para luchar contra el Fascismo. Durante la Segunda Guerra Mundial, algunos partidos comunistas participaron en actividades de restistencia contra el Eje.
El cambiado guión político de la guerra claramente cambió las condiciones de trabajo de los partidos comunistas. Como un gesto de buena voluntad hacia sus aliados Occidentales, Stalin disolvió en
1943 el Komintern.
Comunismo europeo durante la época del Komintern

La mayor parte de los asistentes al primer congreso del Komintern eran provenientes de Europa. En gran parte, la nueva internacional tenía sus raíces en la oposición de izquierda dentro de la Social Democracia europea. En varios casos, hendiduras con el movimiento obrero precedieron la Revolución de octubre. En Holanda, el Partido Social Demócrata se formó en 1909, cuando los sectores izquierdistas se separaron del Partido Socialdemócrata Laborista. En Alemania, los revolucionarios formaron la Liga Espartaquista en 1914. En Suecia la hendidura ocurrió en la primavera de 1917, con la formación del Partido Social Democrático de Izquierda.
En otros casos, los Partidos Comunistas nacieron como grupos que abandonaron la Socialdemocracia después de la Revolución de octubre. En
1918 revolucionarios finlandeses, en el exilio en Moscú después de la derrota de los comunistas en la Guerra civil finlandesa, fundaron el Partido Comunista de Finlandia. El 3 de noviembre el mismo año, el Partido Comunista de Austria fue fundado. Los comunistas austriacos intentaron organizar una república soviética, pero la revolución no se extendió fuera de los principales centros industriales. Pocas semanas más tarde el Partido Comunista Húngaro fue fundado. Bajo el mando de Béla Kun, los comunistas húngaros condujeron una rebelión y fundaron una república soviética. La república fue aplastada por la intervención de los militares rumanos.
En diciembre de 1918, la
Socialdemocracia del Reino de Polonia y Lituania y la izquierda del Partido Socialista Polaco se combinaron para formar el Partido Comunista de los Trabajadores de Polonia. Otro partido se formó en 1918 bajo el nombre de Partido Comunista de Lituania.
Todos estos grupos unieron al Komintern en su fundación en 1919 y se convirtieron en los Partidos Comunistas de sus respectivos países. Un caso notable es el del
Partido Laborista noruego (el ADN) que había sido fundado en 1887. El partido, bajo el mando de Martin Tranmæl, era uno de los partidos fundadores del Komintern. Hacia 1920 éste había excluido la mayor parte de las 21 tesis de Komintern. La adaptación al Komintern causó la división, pues los elementos moderados formaron el Partido Laborista Social Democrático de Noruega en 1921. Pero al final Tranmæl y el Komintern separarían caminos. En 1923 el partido fue expulsado del internacional, y el Partido Comunista de Noruega fue formado por personeros leales al Komintern. Sin embargo hay que mencionar que el ADN permaneció comprometido con el comunismo revolucionario incluso unos años después de su expulsión, y se esforzó en mantener relaciones cordiales con la internacional.
Poco después de la fundación del Komintern, variados grupos socialistas de todas partes de
Yugoslavia se unieron para formar el Partido Socialista de Trabajadores de Yugoslavia.
En 1920, el
Partido Socialista de Trabajadores de Grecia (SEKE) decidió unirse al Komintern. La Sección Francesa de la Internacional Obrera (SFIO) se dividió, formando los elementos revolucionarios la Sección Francesa de la Internacional Comunista. Los comunistas fueron capaces de atraer una mayor cantidad de los socios de la SFIO, y llevaron a cabo la publicación del diario del partido: L'Humanité. El Partido Comunista de Gran Bretaña, también se formó en 1920, sin embargo no se erigió sobre la división del Partido Laborista, sino por la fusión de pequeños grupos de izquierda.
El
16 de mayo, el Partido Comunista de Checoslovaquia fue fundado. En septiembre el mismo año se fundó el Partido Comunista de Bélgica.
En enero de 1921,
Amadeo Bordiga y Antonio Gramsci condujeron el comunsti puri a la sección del Partido Socialista Italiano para formar el Partido Comunista Italiano. El 6 de marzo de 1921, el Partido Comunista Portugués fue fundado. El PCP tenía un fondo algo diferente a los otros partidos comunistas europeos, pues ha desarrollado más el movimiento Anarco-sindicalista en lugar de la Socialdemocracia. El 14 de noviembre de 1921 se fundó el Partido Comunista de España, tras la fusión del Partido Comunista Español (que se desarrolló fuera de la Juventud Socialista) y el Partido Comunista Obrero Español (formado por la facción pro-Komintern de PSOE).
Sin embargo, hacia fines de los
años 1920 el Komintern afrontó varios problemas. El aumento del ardor revolucionario sobre el continente europeo ya había acabado. Los Partidos comunistas fueron establecidos en la mayor parte de países, pero en la mayoría de los casos los comunistas no jugaron el papel principal en el movimiento obrero. Las divisiones socavaron el Komintern, pues los grupos considerados como desleales al mando Komintern fueron expulsados. En 1929, Nikolai Bujarin fue purgado y posteriormente la purga fue realizada en las secciones Komintern. El 28 de diciembre las tendencias oposicionistas dentro del Partido Comunista de Alemania habían desembocado en un partido separado, el Partido Comunista de Oposición. En 1929 la parte principal del Partido Comunista de Suecia, incluyendo la mayor parte del mando de partido y todos los parlamentarios, fue expulsada. Los expulsados formaron un partido comunista paralelo, desarrollado en el seno del Partido Socialista. El año siguiente, la Federación Comunista Catalana-Balear se separó del Partido Comunista de España. En Francia, los elementos purgados participaron en la formación del Partido de Unidad Proletaria.
El
Partido Comunista de Islandia fue formado en 1930, pero los comunistas habían sido políticamente activos allí desde principios de los años 1920.
La extensión del
Fascismo planteó un desafío grave al movimiento comunista. En 1926 el Partido Comunista Italiano había sido prohibido por Mussolini. Después de la entrada en funciones de Hitler en Alemania, el Partido Comunista de Alemania fue prohibido. Cuando la Internacional convocó su 7º congreso en 1935, decidió volver a su antigua política de cooperación con los Socialdemócratas. Por la iniciativa de los partidos comunistas se crearon Frentes Populares en varios países. El Frente Popular ganó elecciones en Francia y España. En Francia los comunistas no tuvieron, sin embargo, gran cantidad de cupos ministeriales.
Como la
Guerra civil española estalló, los partidos comunistas movilizaron su apoyo a la República Española. Un fuerte contingente militar de 40.000 efectivos, las Brigadas Internacionales, fue formado con el apoyo activo del Komintern.
Durante la
Segunda Guerra Mundial, los comunistas movilizaron actividades de resistencia en territorios ocupados por el Eje. Unidades conducidas por guerrilleros comunistas estaban activas en Italia, Francia, Grecia, Yugoslavia y Albania. En otros sitios, los comunistas organizaron actividades de sabotaje.
Comunismo latinoamericano durante la época del Komintern
El primer partido comunista latinoamericano fue el Partido Comunista Mexicano. Había sido fundado como el Partido Socialista Obrero en 1911, pero cambió su nombre a Partido Comunista en 1919. El revolucionario indio Manabendra Nath Roy contribuyó decisivamente a la unión del partido mexicano con el Komintern. De la misma manera el Partido Obrero Socialista de Chile fue fundado en 1912, cambiando su nombre a Partido Comunista cuando se unió al Komintern en 1922.
El
Partido Comunista de Argentina fue fundado en 1918.
El
Partido Comunista de Guatemala fue fundado en 1922.
El 22 de marzo de 1921 el
Partido Comunista Brasileño fue fundado por la fusión de varios grupos locales.
En Ecuador, el Partido Socialista fue fundado en 1925. Posteriormente se denominaría
Partido Comunista de Ecuador.
En 1928
José Carlos Mariátegui fundó el Partido Socialista de Perú, que dos años más tarde se haría el Partido Comunista.
El
Partido Comunista de Costa Rica fue fundado en 1931.
El
Partido Comunista de Puerto Rico fue fundado en 1934.
Es necesario destacar que el desarrollo del movimiento comunista en Latinoamérica diferirá del europeo, puesto que en algunos países los Partidos Comunistas se orientarán hacia la tradición anarco-sindicalista en lugar de la socialdemocracia.
Comunismo africano durante la época del Komintern

La única sección que el Komintern tenía en África subsahariana era el Partido Comunista de Sudáfrica. El partido fue formado en 1921, por la fusión de varios grupos comunistas y socialistas locales. El CPSA ganó prominencia durante la Rebelión de Rand, armada por mineros blancos en 1922. El predominio de la minoría blanca del partido preocupó al Komintern, que obligó al CPSA para adoptar la tesis de "Una República Natal", implicando la tesis que Sudáfrica pertenecía a su población original negra. Después de la adopción por el Komintern de la Línea de combate Popular, el partido comenzó la cooperación con el Congreso Nacional Africano.
El Partido Comunista Francés realmente tenía una célula en
Senegal, conducida por Roger Roche. El grupo no se amplió en lo más mínimo entre la población africana y por ello fue disuelto. Sin embargo ésta célula participó en la formación del comité senegalés del Frente Popular.
Comunismo oceánico durante la época del Komintern
La Asociación Marxista de Nueva Zelanda fue formada en 1918. En marzo de 1921, una unión de agrupaciones dio origen al Partido Comunista de Nueva Zelanda. El partido inició su trabajo al interior de los sindicatos, pero nunca dejó de ser una fuerza menor en la política de Nueva Zelanda.
El
Partido Comunista de Australia fue fundado en Sydney el 30 de octubre de 1920 por un grupo de socialistas inspirados por los informes de la Revolución Rusa. Entre los fundadores del partido se encontraban prominentes unionistas del comercio de Sydney, como Jock Garden, Adela Pankhurst (la hija del sufragista británico Emmeline Pankhurst) y la mayor parte de la entonces ilegal Sección Australiana de Obreros Industriales del Mundo (IWW). El IWW pronto rompió relaciones con el Partido Comunista, debido a desacuerdos con la dirección de la Unión Soviética y del bolchevismo. En sus primeros años, el partido alcanzó alguna influencia en el movimiento sindical en Nueva Gales del Sur, pero a mediados de los años 1920 el partido había disminuido. El partido fue reconstruido por Jack Kavanagh y Esmonde Higgins. Sin embargo debido a la purga mundial de los mandos de los partidos nacionales hecha por el Komintern, fue expulsada por la Internacional.
La era de la posguerra

Después del final de la Segunda Guerra Mundial, el movimiento comunista mundial afrontó un nuevo libreto. Su cuerpo centralizado de organización, el Komintern, había sido disuelto y las secciones respectivas eran ahora entidades independientes. El Kominform, la Oficina de Información Comunista, fue fundado como un substituto de la disuelta internacional.
Las relaciones exteriores de la Unión Soviética habían cambiado bastante. De ser un paria internacional, la Unión Soviética ahora fue acreditada tras haber derrotado a Alemania. Se hacía patente así un riesgo evidente si es que se pensaba realizar acción militar directa de Occidente contra la Unión Soviética. De manera informal, los estados Occidentales reconocieron el predominio de la Unión Soviética en sus países vecinos mientras la Unión Soviética no animó activamente la revolución en los países capitalistas.
La victoria sobre el Fascismo contribuyó a una oleada global de popularidad de los partidos comunistas, sobre todo en Europa. En varios países ésta popularidad redundó en el progreso electoral. Envalentonado por el potencial de alcanzar la influencia por el trabajo de parlamentario así como la nueva política soviética de
Coexistencia Pacífica, la línea política del movimiento comunista cambió.
Notable para la era inmediata de la posguerra fue la formación de organizaciones internacionales que se vincularon al movimiento comunista, como la
Federación Sindical Mundial, la Federación Mundial de la Juventud Democrática, entre otras organizaciones.
Comunismo en Europa Oriental durante la era de posguerra
Hacia fines de la Segunda Guerra Mundial, una robusta presencia militar soviética cubrió la mayor parte de Europa Oriental, para asegurar la dictadura del proletariado y la seguridad de la URSS, ocupando
Alemania Oriental, Hungría, Checoslovaquia, Bulgaria, Rumania y Polonia.
Los gobiernos fueron formados por partidarios comunistas con la ayuda de la Unión Soviética. El rol que los comunistas jugaron en la derrota del fascismo ganó la compasión de sus ciudadanos. En algunos casos se realizaron fusiones entre los partidos comunistas y otros partidos, como en los casos del
Partido Socialista Unificado de Alemania, el Partido de los Trabajadores Húngaros, el Partido de los Trabajadores Rumanos y el Partido Obrero Unificado Polaco.
En
Yugoslavia y Albania, los partidarios comunistas habían liberado sus países sin la ayuda militar soviética, haciéndolos ser en gran parte independientes de la voluntad del PCUS.
Las nuevas repúblicas comunistas tomaron la forma de
Democracias Populares, que son una fase intermediaria en el progreso hacia el edificio del socialismo. Los partidos no comunistas fueron o prohibidos o nombrados como nuevos miembros (En Alemania Oriental se permitió la existencia de partidos no comunistas por ejemplo).
El Comunismo hoy
Después de la caída de los estados comunistas del Bloque Oriental, el movimiento comunista mundial posiblemente fue debilitado. Sin embargo, el movimiento político del comunismo sobrevivió la caída de la Unión Soviética y del Bloque Oriental. De los cinco estados comunistas restantes, China, Vietnam, y Laos se han movido hacia economías de mercado, pero sin la privatización principal del sector estatal, fenómenos conocidos como Socialismo con características chinas y Đổi mới en el caso viatnamita. Cuba recientemente ha surgido de la crisis provocada por la caída de la Unión Soviética (Conocida como Periodo especial) debido al crecimiento en su volumen de comercio con sus nuevos aliados Venezuela y China. Corea del Norte, con su ideología Juche, ha tenido menos éxito que sus colegas al enfrentarse con el derrumbamiento del bloque soviético, aunque no existan signos del gobierno norcoreano que manifiesten una inestabilidad particular. En Mongolia, el Partido Revolucionario del Pueblo Mongol (PRPM) tuvo que formar una coalición con otro partido, pero en 2006 volvió a gobernar de forma absoluta. En Mozambique aun gobierna el FRELIMO, el partido revolucionario. En Moldavia, el partido comunista local ganó el 2001 y 2005 las elecciones parlamentarias, aunque este partido comunista en particular no haya hecho nada radicalmente diferente que el gobierno capitalista que lo precedió. El Partido Comunista de la India es un compañero de coalición clave del Partido del Congreso dirigente y está en el poder en estados como Bengala Occidental, Kerala y Thripura y hay muchos otros partidos comunistas significativos en aquel país. En Ucrania y Rusia, los comunistas salieron segundos en las elecciones de los años 2002 y 2003, respectivamente. En República Checa, el Partido Comunista salió tercero en las elecciones de 2002, al igual que el Partido Comunista de Portugal en 2005. En Venezuela, el Partido Comunista está estrechamente alineado con el gobierno de Hugo Chávez.
Hechos de los Apóstoles, 2, 43-46
Hechos de los Apóstoles, 2, 32-37
Daniel Roche, La France des Lumières (Paris 1993).
Marx, Karl y Engels, Friedrich. Manifiesto Comunista, 1848.
Sheldon L. Richman, War Communism to NEP: The Road From Serfdom, Journal of Libertarian Studies, Winter 1981, 5(1), pp. 89-97 (en inglés)
Carlos Contreras Labarca, Los comunistas, el Frente Popular y la independencia nacional: discursos. Santiago, Antares, 1937.
Véase también
Comunismo
Marxismo
Historia del capitalismo
Historia económica
Karl Marx
Comunismo cristiano
Bibliografía ichael Lynch, Reaction and Revolution: Russia 1894-1924, Hodder Murray, 2005, ISBN 0-340-88589-0
Robert Harvey, A Short History of Communism, Thomas Dunne Books, 2004,
ISBN 0-312-32909-1
Richard Pipes, Communism: A History, Modern Library, 2001,
ISBN 0-8129-6864-6